SHANGAY 287, ENTREVISTA POR AGUSTÍN GÓMEZ CASCALES

ANA TORROJA
LA FUERZA DE LA INSISTENCIA

TRAS AÑOS DE RUEGOS, LOS FANS DE MECANO VOLVERÁN A ESCUCHAR LOS ÉXITOS DEL GRUPO INTERPRETADOS POR SU VOZ ORIGINAL. LOS HERMANOS CANO ESTARÁN… EN
ESPÍRITU, PORQUE LA GIRA ‘LA FUERZA DEL DESTINO SUPONE LA VUELTA ÚNICAMENTE DE ANA TORROJA. AUNQUE ELLA ASEGURA NO SER NOSTÁLGICA, LA PRESIÓN HA PODIDO CON CUALQUIER REPARO Y LA MECANOMANÍA TRIUNFA UNA VEZ
MÁS, REFRENDADA POR EL PREMIO ESPECIAL SHANGAY COMO HOMENAJE A LA CARRERA DEL TRÍO QUE ACABAN DE RECIBIR.

Shangay Express: Y otra vez a hablar de Mecano…

Ana Torroja: ¡Si nunca dejo de hacerlo! Sólo que esta vez está más justificado, con lo cual se lleva mejor.  A mí nunca me ha agobiado que me pregunten por Mecano continuamente, pero sí es verdad que una hace un esfuerzo muy grande por demostrar que puede seguir sola y parece que siempre te ponen el mismo obstáculo en el camino. A veces me da qué pensar, y siempre llego a la misma conclusión: que la gente es muy nostálgica, se queda demasiado colgada del pasado.

S.E. : ¿Se puede considerar esta gira en la que te embarcas un arrebato de nostalgia?

A.T. : Es fruto de un arrebato de nostalgia por parte del público, no por la mía. Si hago esta gira es por ellos… porque yo prefiero mirar siempre hacia delante. Aunque me apetece vivirla, claro; si no, no me habría metido en esta aventura.

S.E. : Este tipo de ejercicio se suele achacar a la falta de creatividad por parte del artista o a sus ganas de recaudar mucho dinero de manera fácil ¿Lo haces por alguna de estas razones?

AT: No. Para mí lo más importante es mi hija y mi familia, y no sabes lo que me ha costado tomar la decisión de embarcarme en esta gira. No la hago por dinero, y creatividad, te aseguro que queda, como se comprobará cuando escuchéis el disco con las nuevas versiones que hemos grabado de las canciones de Mecano. Lo que pasa es que hace años que los fans llevaban pidiendo este tour, y yo, al menos, ya no les quería decepcionar. Está claro que lo suyo es que la hubiéramos hecho los tres miembros del grupo, pero una vez más, no ha podido ser.

S.E. : ¿A lo mejor prefieres hacerla tú sola?

A.T. : No, me habría encantado que hubiésemos sido los tres, pero Nacho está muy metido en su musical, que es como su gira particular, y Jose es el que más de lado se mantiene en cuanto a Mecano. Sólo espero que la gente no se sienta defraudada por lo que vea. Por lo menos, les sacaré en las pantallas de vídeo para que la gente no me grite sus nombres todo el rato [risas]

S.E. : ¿Cómo te estás preparando para una gira de esta magnitud?

A.T.: Con mucho esfuerzo, tanto a nivel físico como mental. Más incluso de cabeza que de otra cosa, no sabes lo que puedo llegar a abstraerme por causa de mi hija. A veces estoy ensayando y el coreógrafo [Francis Viñolo] me tiene que dar un toque: “Ya te has ido con Jara”, me dice; y tiene razón, se me va la cabeza pensando en ella… En ese sentido, prepararme me está resultando mucho más difícil de lo que yo pensaba. Pero pienso estar al cien por cien cuando llegue el momento. Ponerme en buena forma física también me está costando más de lo habitual, pero no tengo más remedio que esforzarme, claro. No me puedo permitir ahogarme cuando esté cantando, eso sí que no.

S.E.: Artistas como Madonna o tú misma, demostráis que no hace falta ser una quinceañera para embarcarse en un espectáculo que exija tanto a nivel físico.

A.T.: Bueno, Madonna está en mejor forma que yo…pero es verdad que la edad es lo de menos en estos casos, mira a Tina Turner. Eso es algo que se lleva dentro o no, está claro. La música te da muchísima energía y vitalidad, y el público, también. Piensa que, en mi caso, una mujer de cuarenta y seis años tiene que transmitirles algo a los chavales de, a lo mejor, doce. Todo eso es lo que a mí me mantiene joven.

S.E. : ¿Lucirás en estos conciertos volantitos y minishorts como los de los gloriosos tiempos de Mecano?

A.T.: Volantitos no creo [risas]. Aunque lo gracioso es que los ochenta estén de vuelta, tanto en moda como en música, así que más de un guiño habrá…

S.E.: ¿Cómo te sientes al retomar canciones que has cantado ya cientos y cientos de veces?

A.T.: Me divierte. Algunas hace tanto que no las canto que es como si lo hiciera por primera vez. Y todas las he traído al hoy, adaptándolas en la medida de lo posible, a mi personalidad. He elegido las canciones que todo el mundo quiere escuchar, y luego hay alguna, como ‘El mapa de tu corazón’, que todavía no sé si la cantaré o no, pero que para mí, siempre ha sido una joyita. Me apetecería también darme algún capricho así.

LA VIDA EN DIRECTO

S.E.: Como espectadora, ¿qué conciertos te han marcado más a lo largo de tu vida?

A.T: El primero, uno de Génesis cuando tenía 14 años. Ese fue el momento en el que me di cuenta de qué era lo que quería hacer (aunque pasó bastante tiempo hasta que empecé a dedicarme a esto). También recuerdo los de Cat Stevens, Jethro Tull, Supertramp, Police… Las giras de antes eran espectaculares. De artistas más actuales, me quedo con los conciertos en que he estado de Prince y Lenny Kravitz.

S.E.: ¿Cuándo dejaste de ir a conciertos?

A.T.: Aún voy, pero sólo cuando tengo opción de estar en la zona vip.

S.E.: ¡Qué señorita!

A.T.: ¡No, al revés! Si es donde peor se ven los conciertos, Pero es donde más cómodo se está, porque allí la gente no me acosa. Como además tengo la mala experiencia de un concierto de Camel, en la zona de colegios mayores de Madrid, en el que casi muero ahogada en una avalancha, pues me da mucha claustrofobia la idea de mezclarme con mucha gente. Para el último concierto de Lenny Kravitz que vi, como no tenía enchufe, compré la entrada encantada, pero de la zona de las gradas de arriba, si no, me muero.

S.E.: ¿Te ha llegado a agotar el revival Mecano vivido en los últimos años?

A.T.: Sin querer, me he mantenido bastante al margen. Para bien o para mal, soy muy camaleónica, y me adapto al cien por cien a cualquier situación que me toca vivir, y en este caso, llevo un tiempo ejerciendo por completo de madre. Como lo primero para mí es mi niña, no tengo ni ojos ni oídos para casi nada más. En ocasiones me meto en Internet o me cuentan, pero la verdad es que llevo tiempo muy ‘out’, casi no me he enterado de nada.

S.E.: ¿Te planteas cerrar este nuevo capítulo de la “Era Mecano” en cuanto termines la gira?
A.T.: Es que yo en general, no me planteo nada; dejo que las cosas vengan como tienen que venir. Esta gira ni siquiera estaba planeada tal y como va a ser al final, se suponía que la íbamos a hacer los tres miembros originales del grupo y la estoy haciendo yo sola. De momento, si pienso que marcará un “ya, hasta aquí” en cuanto a Mecano. Pero lo mismo pasado mañana me sorprenden Nacho y Jose y me proponen que hagamos un disco
juntos…. No sé

S.E.: Luego ¿estás abierta a lo que pueda llegar?

A.T.: Sí, sí, por supuesto. Siempre que se mantenga la ilusión seguiré aquí, con o sin Mecano.

ADICCIONES Y RECHAZOS

S.E.: Que Mecano es un grupo que provoca adicciones incurables, es evidente. Los flamantes ganadores del Premio Especial Shangay  en homenaje a toda una carrera, siguen siendo recordados por sus masivos directos, con montajes a logrando con los que se recorrían toda España, arrasando incluso los pueblos más inverosímiles, que se revolucionaban ante la visita de los Cano y de Torroja, y la llegada del espectáculo más grande del mundo a sus pacíficas localidades. Haciendo memoria, Ana recuerda qué es lo que más le enganchaba de las macrogiras, y qué fue lo que poco a poco le hizo perder las ganas de lanzarse a la carretera.
“Obviamente, la música y el contacto con el público es lo que más engancha”, asegura. “A veces, podía estar hecha polvo, y era un ponerme a
cantar y sentía como si me metiera en una especie de mundo paralelo, precioso, que a la vez siempre ayuda a limpiar tu espíritu. Y eso también le sirve a la gente que te escucha. No había nada que realmente detestara.
Aunque lo que más empezó a cansarme fue el estar siempre de viaje, durmiendo poco y fuera de casa. Y eso me va a costar ahora mucho más”.
Con Ana Torroja acostumbrada a ejercer de madre a tiempo completo, desde luego que salir de gira va a resultarle muy distinto. Aunque por lo que cuenta, la tranquilidad que reinará en sus desplazamientos no se diferenciará tanto de los tiempos de Mecano. Porque, por mucho que se haya dicho, ella desmiente que hubiese épocas de grandes desfases con drogas y descontrol total. “Nos portábamos muy bien”, dice, “sobre todo cuando estábamos de gira, Si no, nos habría sido imposible aguantar el ritmo de ciento y pico conciertos seguidos, como a lo mejor nos hacíamos en un verano, y darlo todo en cada uno de ellos”.
Así que las leyendas negras no salpican a Mecano cuando su ‘frontwoman’ hace memoria, no en vano, eran un grupo para todos los públicos.
“Siempre fuimos muy responsables, y además, predicábamos el ‘No a la droga’. Lo cual no quiere decir, que en algún momento no tuviésemos algún coqueteo con ella, porque somos humanos, pero tenerlo nos sirvió para darnos cuenta del peligro que podía tener irse por ese lado”.
De manera que pocos barcos a Venus cogieron, con cantar sobre ellos les bastó. Y a Ana le volverá a suceder lo mismo este verano.


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